Durante las que han sido las mejores semanas de esta temporada de esquí, con buenas nevadas por todas partes, hemos estado probando, con ganas y a fondo, un esquí que por sus características, va a tener mucho que decir y que se posiciona como una gran opción para irrumpir en pistas a partir del año que viene: el BOOST 700 de Wed´ze.

 

Todo empezaba en Sallanches (Alpes franceses) en un Press Tryp al que nos invitaba el Grupo Decathlon a principios de febrero. La cita incluía una visita a Mountain Store, un edificio singular de 10.000 metros cuadrados al pie del Mont Blanc. Un tercio de la superficie está dedicado a tienda exclusiva de las tres marcas de montaña del gigante francés del deporte: Wed´ze para el esquí y snowboard, Quechua para el outdoor y Simond para el alpinismo y la escalada. 

 

 

El resto de la superficie del Mountain Store lo ocupan los 300 colaboradores que forman el equipo de concepción y diseño compuesto por ingenieros, jefes de producto, modelistas y diseñadores de Wed´ze con el objetivo de estar en contacto con los que son en realidad, los verdaderos "testers" de los modelos que allí se desarrollan: esquiadores y snowboarders.

 

La primera vez que me calcé unos Boost 700, las condiciones para esquiar eran inmejorables: una buena nevada el día anterior en Mégève -una extraordinaria estación en pleno corazón de los Alpes- sol y sobre todo muchas ganas, tardé muy poco en sentir las sensaciones que me transmitía el esquí. Me gusta la pista y "los 700" están pensados para ella al 100%, si además hay nieve polvo y está bien pisada, imaginad...

 

Era el turno de los Samurai 700, el freeride de Wed´ze
 

De vuelta a casa, Decathlon España me ofrecía la oportunidad de escoger los esquís que de entre todos los que había tenido la oportunidad de probar en los Alpes franceses, como los Boost 300 (Pista iniciación), los XLander 500 (All Mountain) o los Samurai 700 (Freeride). Como lo mío es la pista y mi trabajo lo desarrollaba en aquellos momentos en la Escuela de Esquí y Snowboard de La Pinilla, una estación tan brava como exigente en lo que se refiere a la nieve, la mejor opción para una prueba a fondo eran los Boost 700 que me habían gustado en el extraordinario powder bien pisado de los Alpes.

 

 

Una vez en España. el primer test con excelentes resultados lo realizaba en la estación del Pirineo catalán de Boí Taüll Resort. Excelente ocasión para probar los esquís en nieve de muy buena calidad polvo y muy bien apisonada en sus anchas y largas pistas por los sus maquinistas. Una jornada de lujo con los esquís bajo mis pies durante todo el día.

 

Mucho más meridional que Megévè y Boí, en el Centro de la Península, La Pinilla es una de las mejores estaciones con pistas alpinas que conozco para esquiar en la exigente nieve dura. Los primeros días después de recibir las tablas, inmaculadas y nuevas, que me enviaba Wed´ze desde la central de Decathlon España S.A. situada en su tienda de San Sebastián de los Reyes, me dediqué a probarlas dando clases en la Escuela a ratos y en otros a darme buenas esquiadas para sacarles todo "el jugo" posible a los BOOST 700; tarea en la que mi compañero y profesor de esquí Javier Alonso se ha apuntado para contrastar opiniones y ofrecerme su experta opinión profesional. Gracias Javi.

 

 

 

 

Lo cierto es que para un esquí tranquilo, de disfrute y no muy rápido ni exigente, este 100% pistas es muy cómodo y merece el adjetivo "polivalente" de su descripción. Ligéramente Rocker en el Tip (Espátula), permite variar a distintas curvas con facilidad gracias a los 12.9 m de radio de giro. El BOOST 700 de Wed´ze -ni demasiado rígido ni demasiado flexible gracias a la construcción WoodCore Tech- simplemente se deja esquiar. Fino en el patín (72 mm) para cambios de canto rápidos, directo y preciso por el diseño recto de sus colas, es a la vez dócil, muy estable y no te machaca después de horas sobre ellos.

 

 

En cualquier tipo de nieve, se nota su núcleo de madera; tiene un buen deslizamiento de canto a canto y cuando las condiciones lo exigen y la pista está dura, agarran con poderío si los aprietas. Se siente muy bien en el giro corto (Slalom) con estupendas transiciones a los medios. En los largos, a gran velocidad, se nota alguna vibración aunque no muy acusada debido a su diseño Pister Rocker que lo hace flotar un poco en la espátula. 

 

 

 

En consecuencia, el BOOSTER 700 no tiene nada que envidiar a muchos SC (Slalom Carver) pisteros de gama alta entre los que destaca por su buen precio: 299,99 €. Reactivo, estable y con buen agarre, tiene comportamiento impecable que los esquiadores de nivel, exigentes y con técnica, sabrán apreciar. Polivalente: se adapta a cualquier nieve a la vez que permite, sin cansar, desde descensos deportivos o racing a momentos en la nieve más suaves y tranquilos. Sin duda estamos ante un esquí muy "juguetón", ideal para los que nos gusta sentir cómo corre la adrenalina o simplemente disfrutar del puro placer de deslizarnos por cualquier pista.