¿Será que la Cerdanya se mira a sí misma y no se gusta?

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Lun, 15/04/2019 - 18:57

¿Cuál tiene que ser el modelo turístico de futuro de la Cerdanya?

El Consell Comarcal de la Cerdanya y el Patronat Comarcal de Turismo comenzaron hace unos días un proceso de participación ciudadana abierto que, con la pregunta ¿Quin trinxat vols? (El trinxat es un plato gastronómico típico de la comarca), invita a los ceretanos a reflexionar y preguntarse sobre el modelo actual de turismo y, sobre todo, cuál debería ser el nuevo modelo. Si es que tiene que haber uno nuevo, claro. La primera de las tres reuniones participativas se hizo el 4 de abril, en Puigcerdà. Pero habrá dos encuentros más.

Según explicaron los organizadores en la primera reunión, esta es la tercera fase de un plan que primero quiere redactar un diagnóstico escuchando la sociedad civil, pero también los sectores económicos privados. También habrá una comisión de seguimiento que supervisará el proceso con un único objetivo: hacerlo transparente. Y una vez recopilada la información, y llegados a alguna conclusión, hay que suponer que es cuando se iniciará la redacción de un nuevo plan de turismo para la Cerdanya de los próximos 5, 10 o 15 años.

Lo cierto es que fui a la reunión con curiosidad por la temática y por las inquietudes que me motiva una comarca que tiene en el turismo de montaña, y la nieve en concreto, su gran motor económico. Un tema clave para mi dedicación profesional al mundo de la nieve. Y tengo que decir que el desarrollo del encuentro me pareció muy correcto, muy bien planteado, realmente abierto a recoger opiniones, escuchar valoraciones y plantear escenarios de mejora del producto "turismo en la Cerdanya".

Se escucharon, en más de una ocasión, las palabras desestacionalizar, sostenibilidad e internacionalización, a la vez que alguna alerta sobre una posible masificación, la conservación del patrimonio y el medio ambiente o también una posible "turistificación" de la identidad de los ceretanos. Pero también se pusieron en valor fortalezas y otros valores añadidos de una Cerdanya vecina, la Alta Cerdanya, o Cerdanya francesa para algunos, los cuáles habría que tener presentes e intentar incorporar de alguna manera al nuevo plan de turismo.

Las 3 horas que duró la reunión pasaron deprisa, quizá porque los cerca de 30 o 35 asistentes no estuvimos 3 horas sentados y escuchando, sino porque nos vimos las caras, nos presentamos para saber quiénes éramos y qué representábamos y porque, dentro de la misma sala donde se hizo la reunión, nos fuimos posicionado físicamente en diferentes áreas y por diferentes argumentos para decantar opciones, respuestas o para medir nuestra implicación personal ante el turismo. No se podía hacer más ameno, sinceramente.

En la última hora de la reunión se organizaron diferentes mesas de debate, del todo aleatorias y abiertas, y en ellas se habló de otras debilidades o soluciones en un formato de "pequeño comité". Sí, en total 4 "pequeños comités", que luego todos ellos presentaron en público sus conclusiones.

En mi mesa, en concreto, se habló de la creación de nuevos productos deportivos, como el ciclismo. Se habló del trabajo realizado con los planeadores en la Cerdanya y su internacionalización. Se habló de hoteles, de precios o de productos turísticos complementarios a la nieve, el esquí o el senderismo. Se habló del Túnel del Cadí y el filtro que supone, para lo positivo y para lo negativo, su peaje.

En otras mesas, se habló de ir mucho más allá del turismo de vacaciones de verano, del turismo escolar en invierno, del turismo de negocios, de crear catálogos de servicios y calendarios de actividades, de cómo mejorar la comunicación o incluso de crear una marca Cerdanya asociada en determinados casos a la marca "Barcelona".

En definitiva, aunque es imposible desglosar y explicar aquí todo lo que allí se vio y oyó, y teniendo presente que me dejo cosas importantes para comentar, sí tengo que decir que hubo algo que me sorprendió: ni un sola mención a los posibles juegos de invierno en la Cerdanya.

En cualquier caso, hay previstas dos reuniones más, una para el 15 de mayo en Bellver de Cerdanya y otra para el 12 de junio en Alp.

Y por cierto, para los que no puedan asistir, también se podrán hacer aportaciones en la web www.cerdanya.org, pero sinceramente, si la Cerdanya os interesa de verdad y tenéis inquietudes por su futuro turístico, os será mucho más provechoso y útil , para vosotros mismos y para vuestra comunidad, que asistáis a alguna de las próximas reuniones citadas unas líneas más arriba. ¿Os animáis? Y sobre todo ¿Qué opináis?


Colas en los accesos al Túnel del Cadí (Archivo: IST).

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