Grandvalira apuesta por la excelencia gastronómica junto a la Fundación Alícia

Grandvalira apuesta por la excelencia gastronómica junto a la Fundación Alícia

Presentación en Grandvalira del proyecto de investigación de la cocina andorrana

Mié, 22/03/2017 - 12:15
La fundación ha realizado un análisis de la cocina autóctona y de las cartas de los establecimientos de Grandvalira-Saetde con el objetivo de potenciar la gastronomía andorrana en las próximas temporadas. El objetivo del proyecto es crear conocimiento de la cocina andorrana en los restaurantes de la estación y que estas sean un elemento diferenciador respecto a otros destinos
Grandvalira ha presentado las conclusiones del proyecto de investigación de la cocina andorrana y de los restaurantes del dominio. El acto, celebrado esta mañana en el Racó de Solanelles (sector Encamp), ha contado con la presencia de Alfonso Torreño, director general de Grandvalira-Nevasa, Verònica Canals, managing director de Grandvalira – Saetde y de Marc Puig-Pey, responsable de cocina de la Fundación Alícia. 
 
En los últimos 5 años, la estación ha invertido 10 millones de euros en los espacios gastronómicos y la introducción de conceptos culinarios importados de las grandes capitales
Entre los objetivos del proyecto de colaboración con la entidad que nació de la mano del chef y copropietario d’El Bulli y el reconocido cardiólogo, Valentí Fuster, destaca la voluntad de convertir a Grandvalira en embajadora de la cocina andorrana a través de sus restaurantes y que este conocimiento de la cocina autóctona se convierte en uno de los motivos de elección del dominio por parte de los esquiadores.  
 
 
El acuerdo de colaboración nace de la voluntad histórica del domino andorrano de dotar su oferta gastronómica de una excelencia única en el sector, así como de acercar la cocina autóctona del Principado a los cerca de dos millones de esquiadores que visitan sus instalaciones cada año. El proyecto arrancó con una primera fase de conocimiento por parte del departamento de Patrimonio Agroalimentario de la Fundación Alícia que realizó un estudio para encontrar las potencialidades gastronómicas que ofrece la cocina andorrana. 
 
Una vez evaluados los productos e ingredientes locales más característicos de la gastronomía local, se han puesto de manifiesto cerca de una treintena de elaboraciones representativas de la cocina autóctona del Principado como la escudella, el arroz de montaña, los saquitos de col o las trufas escurridas, entre otros. Con estos conocimientos conseguidos, la Fundación ha seleccionado una receta representativa de la gastronomía andorrana que aporta un valor añadido a los esquiadores y suficientemente versátil para poder ser incluida en todas las cartas de los distintos puntos de restauración del dominio. 
 
El plato elegido para representar esta apuesta por la gastronomía andorrana de calidad ha sido el caldo, un plato muy característico de la cocina de los Pirineos y muy ligado a Grandvalira ya que se trata de una elaboración propia del invierno y de un plato reconfortante y nutritivo ideal durante las jornadas de esquí.
 
Por otro lado, el equipo de la fundación ha creado un manual de uso que permite implementar estos conocimientos de la cocina andorrana a otros establecimientos del Principado, así como un recetario muy completo con las recetas más representativas de la gastronomía de Andorra. 
 
 
 
Una apuesta decidida por la gastronomía de altura 
 
La decidida apuesta de Grandvalira por la mejora de la gastronomía en pistas es uno de los principales objetivos de la estación más grande del sur de Europa temporada tras temporada. En los últimos 5 años, el dominio ha invertido 10 millones de euros con el objetivo de realizar un salto cualitativo en su oferta gastronómica y convertirse en un referente de la buena restauración a pie de pista a nivel europeo.
 
Actualmente, el 90% de los restaurantes en pistas han sido completamente renovados, más de 400 personas trabajan en los 60 puntos de restauración del dominio y la restauración se ha convertido ya en la segunda unidad de negocio con más volumen de facturación, después de la venta de forfaits.  
 
 
 
Una de las fortalezas de la oferta gastronómica de Grandvalira y una de las razones por las cuales la opinión de los usuarios ha mejorado tanto en los últimos años, es la capacidad que tiene el dominio para identificar las últimas tendencias culinarias de las principales capitales e importarlas al Principado adaptándolas al mundo de la nieve. Es el caso de los food ratracks, una de las principales novedades de esta temporada que está teniendo muy buena aceptación entre el público. El dominio ha condicionado dos máquinas pisa nieve como puntos de restauración itinerantes que recorren cada fin de semana los sectores de la estación. Así mismo, la estación andorrana ha incorporado nuevas formas de disfrutar de las comidas con una nueva oferta flexiteriana y otras propuestas saludables aptas para celíacos y para aquellos usuarios que quieran seguir cuidando su alimentación mientras practican los deportes blancos. 
 
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