El Patronato de Turismo de la Diputación de Lleida prevé un comportamiento turístico óptimo en el Pirineo de Lleida para estas fiestas de Navidad, Año Nuevo y Reyes, que podría situarse en una media de ocupación del 75% a partir del día de San Esteban y hasta el domingo 7 de enero.

 

La mejor ocupación se producirá de cara a la celebración del Año Nuevo, entre el 30 de diciembre y el 2 de enero, cuando se llegará a rozar la plena ocupación en la mayor parte de los establecimientos de alojamiento turístico del Pirineo.

 

 

 

Desde San Esteban hasta el 29 de diciembre la ocupación también será buena, mientras que la semana de Reyes, del 3 al 7 de enero, el nivel de ocupación será inferior. El Patronato estima que durante estas fiestas de Navidad más de 100.000 turistas visitarán las comarcas de Lleida y se llevarán a cabo unas 250.000 pernoctaciones, principalmente debido a las buenas condiciones que en términos generales ofrecen los diferentes centros de invierno del Pirineo.

 

Las estaciones de esquí podrían vender alrededor de unos 250.000 forfaits. Hay que recordar que el inicio de esta temporada de esquí está resultando positivo. La campaña se pudo iniciar el 18 de noviembre y por el puente de la Purísima se alcanzó una ocupación media de entre el 80 y el 85% y se vendieron 97.000 pases de esquí, la segunda mejor cifra registrada para este periodo festivo.

 

El Patronato de Turismo de la Diputación de Lleida estima que durante el período de 13 días comprendidos entre el martes 26 de diciembre, festividad de San Esteban, y el domingo 7 de enero de 2018, al día siguiente del día de Reyes, la media de ocupación turística en las comarcas del Pirineo leridano oscilará alrededor del 75%. La mejor ocupación se producirá la semana de Navidad hasta Año Nuevo con dos períodos bien diferenciados. Por un lado, del 26 al 29 de diciembre la ocupación se situará entre el 65 y el 80% de acuerdo con las diferentes tipologías de alojamiento turístico. En concreto, los hoteles prevén para estos días tener una ocupación en torno al 65%, el turismo rural rondará el 80% en el conjunto de la demarcación y las plazas de bungalows en los campings estarán alrededor del 60%.

 

 

De cara a la fiesta de Año Nuevo, ya partir del 30 de diciembre y hasta el 2 de enero es cuando se llegará al lleno total en buena parte de los establecimientos del Pirineo, principalmente los ubicados en proximidad de las estaciones de esquí en las diferentes modalidades de alojamiento de las zonas turísticas de la demarcación de Lleida.

 

A partir del 3 de enero y hasta el domingo día 7, con la festividad de Reyes, se prevé que el nivel de ocupación en general sea más bajo y actualmente, de acuerdo con las reservas, podría situarse entre el 40 y el 75% según las diferentes modalidades de alojamiento y las diferentes zonas turísticas, si bien la climatología hace esperar que en los próximos días el nivel de reservas se anime.

 

 

 

Las buenas condiciones que ofrecen los diferentes centros de esquí alpino del Pirineo de Lleida se reflejan en la buena cantidad de nieve acumulada y en el hecho de que tienen un alto porcentaje de pistas abiertas al público. En cuanto a las estaciones de nórdico -en el momento de escribir estas líneas- la de Aransa tiene 27 km de circuitos abiertos con un espesor de nieve polvo que oscila entre los 20 y los 40 cm; Lles de Cerdanya tiene 24 km de circuitos marcados con espesores que van de los 25 a los 45 cm; Tuixent-La Vansa dispone de 11,5 km de recorridos abiertos con espesores de nieve que oscilan entre los 10 y los 30 cm; Sant Joan de l'Erm con 12 km de circuitos marcados y espesores entre los 10 y los 35 cm, y, finalmente, la estación de Virós Vallferrera tiene previsto abrir a partir del 28 de diciembre sólo para usos turísticos.