La de Ribes de Freser será la única esquiadora alpina femenina que represente a España en los Juegos Olímpicos. Para Núria Pau, del equipo FAST Holaluz (Female Alpine Ski Team), es un sueño hecho realidad, ya que desde muy pequeña ha soñado en convertirse en olímpica. 

 

 

“Todavía estoy asimilando la noticia. Es muy emocionante para mí, llevo años luchando por este objetivo y todavía más tiempo soñándolo. Ha requerido mucho esfuerzo, perseverancia, constancia, lucha y todo ha merecido la pena”, afirma Núria Pau. “Los afronto con mucha motivación y con muchas ganas de dar lo mejor de mí. Ha sido una temporada complicada por las lesiones que he sufrido, pero ya estoy totalmente recuperada y la superación de estos obstáculos me ha llevado a tener más confianza en lo que puedo hacer”, concluye Núria.

 

La esquiadora española hizo un muy buen papel el pasado domingo en la Copa de Europa de Orcières, Francia, en la que salía con el dorsal número 40. Consiguió finalizar la primera manga en la 27ª posición y la segunda en octava posición. Consiguiendo así la posición número 18.

 

A este buen resultado se le suman los conseguidos la pasada temporada: octava en la Copa de Europa de Andalo (quedando primera en la segunda manga), entrar dentro del top 30 en la primera manga de los mundiales de Cortina, quedando dentro del top 30 en prácticamente todas las últimas Copas de Europa de la temporada y conseguir la 36ª posición en la Copa del Mundo en Eslovaquia.

 

Núria Pau ha demostrado su capacidad de lucha en una temporada atípica, puesto que venía de una lesión por a una caída que sufrió esquiando al final de la pasada temporada, en la que se le salió el hombro y se rompió la nariz. Por delante tenía cinco meses de recuperación que superó estoicamente pero que la alejaron de las pistas. En septiembre volvió a esquiar y recuperó las buenas sensaciones rápidamente. Y una vez recuperada, al final de la pretemporada de este año, sufrió una pequeña lesión en el tobillo que no le ha permitido entrenar y competir tanto como hubiera deseado.

 

 

 

Núria Pau empezó a esquiar a los tres años en la Vall de Núria, Girona, y gracias a su extraordinaria progresión a los 12 años entró en La Molina Club d’Esports, a los 16 en el equipo catalán de esquí alpino y a los 17 en el equipo Júnior de la RFEDI. En 2017, se queda fuera del equipo español por no cumplir sus criterios y decide viajar sola a Sudamérica durante tres meses para conseguir la puntuación necesaria para entrar de nuevo al equipo español y poder luchar para competir en los Juegos Olímpicos de Pyongyang 2018. 

 

Vuelve como campeona absoluta de Slalom especial y con el ranking mundial suficiente para reincorporarse a la RFEDI. Compite en el circuito de Copas de Europa para poder entrar a sus primeros JJOO y lo consigue justo una semana después de que acabaran. Esto no la desmotiva y esa misma temporada finaliza 16ª en las finales de la Copa de Europa de Slalom en Soldeu, Andorra. La siguiente temporada, 2018/2019, la finaliza con una destacada 36ª posición en el Campeonato del Mundo de Are (Suecia) y como Campeona Absoluta en Bélgica, Luxemburgo y España, finalizando primera en todas las modalidades: Slalom, Gigante y Super Gigante. 

 

La temporada 2019/2020 fue complicada a causa de la COVID-19, que obligó a finalizarla antes de tiempo. Aun así, Núria Pau consiguió dos top 30 en Copa de Europa, uno en Italia y el otro en Suiza. La temporada 2020/2021 fue una muy buena temporada para Núria Pau a pesar de las dificultades derivadas de la pandemia. Ahora Núria afronta con mucha motivación e ilusión su sueño desde pequeña: competir en unos Juegos Olímpicos.