Se trata del "odiado" polvo sahariano, que ha vuelto este lunes y martes a la Península y ha afectado a varias estaciones de esquí de la Península, principalmente en las pistas de Sierra Nevada y del Pirineo.

 

 

El polvo sahariano que tiñe la nieve acelera la fusión de la misma. Cada vez que nos visita el polvo del Sahara, la nieve de los Pirineos o Sierra Nevada se funde a una velocidad más rápida de lo habitual, según el estudio "Proyecto Aeronival" de Jorge Pey.

 

 

Este inicio de semana, se ha producido un episodio “excepcional” de polvo procedente del desierto del Sahara, un fenómeno que no se producía con esta intensidad desde hacía varias décadas.

 

Este fenómeno se dirige de sur a norte por el este del país, "aprovechando el lado este de la DANA que se ha formado en el golfo de Cádiz para ascender desde el desierto del Sáhara hasta Europa occidental" en lo que se ha convertido en algo "realmente excepcional", ha explicado en declaraciones a Efe el presidente de la Asociación de Geógrafos Españoles (AGE), el catedrático de la Universidad de Alicante (UA) Jorge Olcina.

 

 

La masa de polvo también llegó a buena parte de Europa occidental, hasta Reino Unido y en los Alpes cubrió incluso las pistas de esquí del Tirol austriaco.

 

 

El color anaranjado y rojizo que tiñen los cielos y la nieve de las estaciones de esquí, además de muchas ciudades mediterráneas, se ha ganado en redes la etiqueta de #Apocalípsis que se ha convertido en tendencia en Twitter, #polvosahariano, #calia, #sahara, entre otras.