Una familia de Ripoll funda una marca de esquís artesanal de altas prestaciones en un garaje

Una familia de Ripoll funda una marca de esquís artesanal de altas prestaciones en un garaje

Probando los modelos de freeride de Bulletskis en fuera pista.

Lun, 20/11/2023 - 08:37
Tras comenzar a fabricarlos para su uso propio, la demanda ha llevado a la familia Molas Rocas a comercializar “Bulletskis”.
Google, Amazon, Dell, Maglite, Microsoft, HP, Mattel, Apple, Lotus, Harley Davidson, Disney y Velas Yankee son todas ellas las empresas de éxito que comenzaron en un garaje en sus inicios y sin prácticamente recursos.
 
El ripollès Eloi Molas Roca, junto con su hermano Pau y su padre Oriol, podrían seguir sus pasos.
 
La familia Molas Rocas ha fundado desde el garaje de su casa en Ripoll (Girona) una nueva marca de esquís: Bullet, que traducido al catalán significa "bala".
 
"Nuestro objetivo era crear un producto muy mimado, hecho de forma artesanal, pero que fuera tan resistente como los esquís industriales", explica Molas.
 
Eloi Molas Roca, en su garaje donde fabrican los esquís. (Foto: ACN/Oriol Molas)
 
Después de tres años perfeccionando los modelos y como consecuencia de la demanda del producto por parte de otros esquiadores, ahora los sacan a la venta. “Nunca pensamos en hacer una marca, era un proyecto para hacernos los esquís y compartir tiempo en familia”, dice.
 
Sin embargo, han acabado creando también una colección de complementos que incluye protecciones que se han utilizado en los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín.
 
De la pasión de una familia de Ripoll por el esquí, ha nacido una nueva marca de material para practicar este deporte. Bullet, que en catalán significa bala, empieza ahora a vender unos esquís de madera que los Molas fabrican artesanalmente en el Pirineo y que han estado perfeccionando durante tres años.
 
la pasión por el esquí viene a los Roca de pequeños. (Foto: bulletskis.com)
 
“No teníamos intención de venderlos”, dice Eloi, que explica: “Empezamos porque teníamos ganas de hacernos nuestros esquís; en casa siempre nos ha gustado mucho este deporte, mis padres incluso habían sido profesores de esquí antes de que naciéramos nosotros”. Ahora, "impulsados ​​por la gente que nos pedía que lo hiciéramos, hemos acabado haciendo una marca".
 
En Ripoll, Eloi Molas y su padre Oriol pasan horas y horas cada día en el garaje de casa -que ahora han transformado en un pequeño taller para poder tener más máquinas y mejorar la fabricación de los productos- haciendo esquís.
 
La iniciativa arrancó en el 2017, cuando Eloi vivía en Barcelona -donde estudiaba el grado de Arquitectura-; su padre, que es fotógrafo, estaba en Ripoll -en la casa familiar donde ahora tienen el taller- y su hermano, Pau, hacía un máster en Diseño de naves espaciales en Suecia. "Fue una forma de volver a conectar y obsesionarnos por un proyecto común", explica Eloi, que con 26 años es el pequeño de los dos hermanos.
 
Foto: bulletskis.com
 
Construir las máquinas para fabricar esquís
 
Todo empezó con el diseño y construcción de una prensa neumática, que les permitiera unir las maderas y las diferentes capas de fibras de carbono que conforman los esquís. “Estábamos estudiando y decidimos que debíamos crearnos nuestra máquina”, explica el pequeño de los hermanos, que asegura que, de hecho, “tampoco se pueden comprar”.
 
El proceso duró dos años y todavía es la que utilizan. Además, han sumado una segunda máquina similar -que también se han construido y que les permite estampar los diseños del acabado-, así como un desove para cortar los esquís y otra herramienta para acabar las suelas
 
Eloi, con ayuda de su hermano Pau -que ahora vive en Suiza, donde también ha creado una empresa de satélites-, diseña todos y cada uno de los modelos que fabrican.
 
El garaje donde se fabrican los Bullets. (Foto: ACN/Oriol Molas)
 
“No soy el único de mi edad que emplean; creo que todo el mundo tiene la capacidad de hacerlo y sólo hace falta enamorarse y obsesionarse con un proyecto para sacarlo adelante”, afirma. “La empresa de mi hermano y la que estamos arrancando conjuntamente son distintas, pero al final se trata de resolver problemas para conseguir hacer lo que quieres. Él para mí es una inspiración”, comparte.
 
Esquís con el alma de madera
 
Los esquís que realizan en Ripoll tienen el alma de madera. "Ahora hay muy pocas marcas que lo hacen así", lamenta Eloi Molas, que dice que el producto "se está prostituyendo porque se construye con materiales más baratos que son más resistentes".
 
Inspirada en una marca suiza que todavía respeta estos inicios, Bullet ha apostado por combinar la madera de fresno con la de paulownia para hacer los esquís “resistentes y flexibles”.
 
Foto: bulletskis.com
 
"Los hemos tirado desde un balcón, golpeado contra una pared con fuerza, doblado… de todo para comprobar que realmente aguantan".
 
Esto lo han hecho porque Eloi es un gran “admirador de la artesanía”, pero generalmente la percibe como una forma de construir “que fabrica productos más delicados”. "Lo que hemos querido nosotros es hacer esquís artesanos y muy mimados, pero que fueran tan resistentes como los esquís industriales", dice, y asegura: "Creo que lo hemos conseguido".
 
En esta línea de apostar por la resistencia, los esquís que fabrican en Ripoll van recubiertos de varias capas de fibra de carbono que han aplicado, explica Eloi, "gracias a las investigaciones de Paz en la industria aeroespacial".
 
En apariencia, pues, se parecen mucho a unos de proceso industrial. "Queremos que quien los utilice tenga una experiencia única sobre los esquís y note que el producto está muy cuidado, pero al mismo tiempo comparte características con uno de proceso industrial".
 
Gama de esquí de pista.
 
Protecciones olímpicas
 
Mientras han estado desarrollando los esquís, en el taller han fabricado protecciones por competición, palos y powpads, que también sacan a la venta. De hecho, como las protecciones son uno de los productos que han logrado desarrollar y perfeccionar más rápido, ya las han utilizado deportistas de alto nivel en pruebas de la Copa del Mundo, así como en los Juegos Olímpicos de invierno de Pekín 2022.
 
Ahora que comienzan una aventura empresarial, se posicionan como "la única marca en el mundo que hace esquís y protecciones".
 
Para el futuro, quieren poder crecer y dejar el taller de casa para llegar a disponer de más espacio y recursos para construir sus esquís. “Me gustaría poder trasladarnos a una nave y tener más máquinas para fabricarlos”, concluye Molas, quien asegura que el precio de los esquís que hace en Ripoll y saca a la venta no distará de los industriales porque “aunque Bullet ha nacido como fabricante de esquís hechos a mano, cuya voluntad es industrializar todo el proceso para competir con las grandes marcas”.
 
5
Total: 5 (2 votos)
Su voto: Ninguno

¿Te ha parecido interesante?  Recibe las últimas noticias y reportajes Recibir